Al borde de la locura
por fernandobenavides
Se comienza bien
en la noche
antes de conocerte;
cuando todo tiene sentido
alguno.
En el día continúas
con tu trabajo
hasta que termina
y quieres llegar a desbordarte;
aceptar lo que queda de ti
(que es lo único verdadero).
Hemos pocos demonios perdidos
tirados en el azulejo
del baño
arrastrándonos hasta la madrugada.
Sin mujeres,
sin tiempo de sobra,
al borde de la locura;
cerveza con sabor a pasta de dientes.
Las peores crisis
ocurren en la soledad
de una pequeña habitación
buscando la poca salvación.
Quién aguanta
a un hombre
que se pierde continuamente,
y marca el camino
de los que vienen
a olvidar.
La virtud
se esconde
en la desesperación.
Somos los últimos en la fila,
estamos perdidos
olvidados
y somos pocos.